"El mercado está vivo, tanto para los compradores como para los promotores"
Es un hecho que el sector inmobiliario está sufriendo un reajuste en 2023, por el alza de tipos y los costes de construcción, pero también que el mercado está vivo, tanto para los compradores (muchos de ellos extranjeros y en zonas de costa) como para los promotores, que están detectando y encontrando oportunidades de negocio.
Desde Tecnicasa, se apunta que el mercado de vivienda o residencial seguirá estando en el foco de los inversores en un momento en el que, además, sigue la escasez de suelo. De hecho, todos los promotores, al unísono, están demandando una mayor predisposición por parte de la administración a la hora de la tramitación de licencias y autorizaciones: resulta fundamental seguir acortando los plazos.
Todavía en Madrid, Barcelona o Málaga, las grandes capitales, sigue existiendo una oferta de obra nueva muy inferior a la demanda real. Y, esto, en un escenario en el que hay una parte considerable del parque inmobiliario anticuado y que suspende en términos de eficiencia energética: el sector espera que las ayudas ‘Next Generation’ destinadas a la rehabilitación se aprovechen para rejuvenecer pueblos y ciudades.
Desde el Departamento Comercial de DEXTER, su director, Guillermo Díaz incide en que “en este momento, promotores están tirando más que nunca de capital privado para préstamos promotor propiamente dichos, pero también para financiarse y comprar suelo o para comprar activos que son terminados o actualizados y puestos en venta. Las oportunidades que les estamos brindando en la financiación alternativa, nuestra flexibilidad y nuestra agilidad son fundamentales para entender esta alianza que, insisto, atraviesa su mejor etapa”, concluye el directivo de la compañía.