Costa del Sol: donde el turismo residencial recibe el impulso del capital privado
En los últimos años, Málaga se ha consagrado como uno de los destinos residenciales más importantes del mundo. La rampa de ascenso y posicionamiento de la Costa del Sol ha sido incontestable y las previsiones son tremendamente positivas.
Son numerosas las promotoras que de la pandemia del covid-19 a esta parte han invertido centenares de millones de euros, en apuestas claras y sólidas. Todas, de una forma u otra, han puesto en práctica un modelo de turismo residencial responsable, centrado en ofrecer segundas residencias para turistas tanto nacionales como internacionales que buscan disfrutar del estilo de vida mediterráneo.
El último lustro ha visto un aumento significativo del número de clientes provenientes de Europa del Este, de Estados Unidos o de los países escandinavos. En términos globales, Andalucía recibe anualmente 33 millones de pasajeros en aeropuertos españoles. En cuanto al turismo, el 34% de los viajeros internacionales que llegan a Málaga corresponden a turistas residenciales, y más de un millón son residentes.
Más datos: la inversión extranjera en la región supera los 580 millones de euros, mientras que el PIB generado por el sector turístico alcanza el 12,5%, lo cual es de una indudable importancia. En estas coordenadas, DEXTER viene desde su fundación contribuyendo con financiación alternativa, a través de capital privado, al desarrollo de numerosas promociones, en casco urbano, playa y golf. Y en todas las tipologías de vivienda, no sólo en el sector del lujo.
Desde su Departamento Comercial, su responsable, Andrés Alén incide en que “condiciones como la seguridad, la conectividad, la cultura, la gastronomía… en absoluto son anecdóticas o periféricas. Son fundamentales para entender por qué estamos ayudando a la financiación de compra de activos, de ejecución de obra o de compra de suelo finalista, siempre con proyecto y licencia. Los empresarios tienen buenos proyectos y hay una demanda de compradores finales muy sostenida”, señala Alén.
Málaga, en suma, cuenta con todos los elementos para mantenerse posicionada como una de las mejores regiones del mundo para invertir, visitar, trabajar y vivir.
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