La inversión inmobiliaria extranjera, con paso firme en Islas Canarias

El mercado inmobiliario en Canarias vive un auge sin precedentes gracias a la inversión extranjera en propiedades de lujo, una tendencia que va a más en la última década y que está lejos de ser flor de un día.

Ya en tiempos del gobierno de Rajoy, a través de las “golden visas”, los extranjeros de fuera de la Unión Europea podían obtener permisos de residencia si adquirían propiedades por un valor superior a 160.000 euros. Esa política tuvo un efecto inmediato en regiones como Canarias, que buscaban desesperadamente reducir el excedente de viviendas acumuladas tras el colapso de la burbuja inmobiliaria. Esos compradores eran fundamentales para revitalizar el mercado inmobiliario local y eso se demostró en la medida en que Canarias se convirtió en la segunda región de España con mayor porcentaje de compradores internacionales, solo superada por Baleares.

Hoy, el capital privado y la financiación alternativa están haciendo posible que promotores y constructores saquen adelante sus proyectos ante la escasez de financiación bancaria tradicional. Bloques de apartamentos amplios con terrazas, adosados, pareados y villas de lujo están recibiendo recursos a través de fondos de inversión y fondos deuda, a sabiendas todos los actores involucrados de la notable fuerza comercial de esas promociones.

La presidenta de DEXTER, Yeidy Ramírez, lo valora de forma muy clara: “Islas Canarias han sido para nosotros, en los más de cinco años de la compañía, un enclave en el que hemos facilitado operaciones de financiación, ejercicio tras ejercicio, siempre con garantía hipotecaria. No sólo a clientes internacionales sino a promotores locales, con una idea de negocio muy definida y trabajada y que, por supuesto, conocen bien el terreno que pisan”, concluye Ramírez.