“La conexión entre la financiación alternativa y la compra de viviendas por extranjeros”

Hay estadísticas, la mayoría, que no son fruto de la casualidad, y números detrás de los cuales hay que hacer varias lecturas para entenderlos. Recientemente hemos conocido que la población extranjera ha impulsado el PIB español, gastando un 60% más que en 2019. Así, es innegable que el consumo de los no residentes en España está siendo crucial para la recuperación de la economía después de la pandemia.

Concretamente, en el segundo trimestre de 2023 se espera, cuando sean públicos los resultados, que el nivel de gasto de los extranjeros supere en un 60% al registrado en el mismo periodo de 2019. Se están viendo beneficiados los destinos de playa y las ciudades más turísticas. Y ésta es la razón por la que las empresas vinculadas al sector del turismo rebosan optimismo ante la fortaleza de los viajeros de otros países.  

Pero no se trata sólo de viajeros sino de personas, de familias, de empresas que llegan a España para instalarse, para vivir, para desarrollar su actividad económica. En este sentido hay que entender la compra de viviendas por extranjeros, que está experimentando un repunte y un esplendor difícilmente imaginable hace unos años; y hay que entender, en paralelo, que esos compradores de vivienda estén animando a los promotores y constructores a desarrollar y agilizar sus proyectos, especialmente los residenciales, ante la fuerte demanda del mercado y las permanentes oportunidades de negocio.

Así, desde el Departamento de Riesgos de DEXTER, su Analista Principal, Rubén Miñarro apunta que “es algo muy frecuente que cuando analizamos solicitudes de financiación de promotores y constructores, de empresas españolas, y cuando entramos en las reservas de viviendas que hay antes de empezar a construir, un alto porcentaje de ellas han sido prevendidas a ciudadanos europeos y americanos, que fijan en España su primera residencia o que compran como lugar de vacaciones. Es innegable que esta tendencia está dinamizando enormemente el mercado inmobiliario. Y nuestro papel como palanca financiera está teniendo un gran protagonismo y sirviendo de gran ayuda”, concluye Miñarro.