"La liquidez es imprescindible para el funcionamiento diario de las empresas, es el circulante que garantiza que puedan desarrollar su actividad con total normalidad"
La llamada a la noticia la hacía la propia patronal CEOE a finales de 2022: hay un temor más que fundado a que el endurecimiento de las condiciones financieras eleve el coste de los nuevos préstamos y lleve a la banca a exigir requisitos adicionales al renovar las líneas de crédito ya vigentes.
El arsenal de medidas que el Banco Central Europeo (BCE) ha puesto en marcha en forma de subida de los tipos de interés oficiales, entre otras, y el que seguirá desplegando a lo largo de los próximos meses para controlar la inflación, ha puesto en alerta a los hipotecados pero también a las empresas, que ven cómo la incertidumbre económica puede traducirse en nubarrones en el medio plazo. Y el objetivo clarísimamente es despejarlos, evitarlos.
La liquidez es imprescindible para el funcionamiento diario de las empresas, es el circulante que garantiza que puedan desarrollar su actividad con total normalidad. Desde la patronal apuntan precisamente que la restricción al crédito de la banca tradicional “afectará a todo el tejido productivo, aunque los impactos serán más notables en las empresas más endeudadas y con pérdidas que por definición son las más vulnerables”.
Es en este ámbito en el que se entiende mejor la pujanza del capital privado, que viene de una curva claramente ascendente en 2022 y se anuncia que va a seguir una línea más positivamente acusada aún en 2023 en España pero, en general, en el mundo occidental. Tanto el ‘private equity’ como la financiación alternativa vía fondos de inversión se revelan como un recurso, una herramienta para el crecimiento empresarial para aquellas compañías que presentan cimientos sólidos, aspiran a seguir apuntando alto pero necesitan capitalizar sus proyectos, ir más allá de lo que significa la aportación de recursos propios, de sus fondos disponibles en caja.
Así, DEXTER ofrece préstamos-puente, liquidez inmediata mediante la aportación de una garantía hipotecaria, a partir de un millón de euros, y que según señala su Director Comercial, Guillermo Díaz, “está resultando ser un producto cada día más demandado por los empresarios para superar precisamente esa escasez de líquido que transitoriamente se puede tener por una mera cuestión de ciclos”.
A ello, añade Díaz que “igualmente, y frente al momento de cierto paréntesis de la banca tradicional en el área de crédito, el hombre de negocios sabe que sus proyectos no pueden quedar paralizados, no pueden dormirse, y está recurriendo a las innumerables ventajas que ofrece la financiación alternativa con capital privado. Se presenta un 2023, en el mejor sentido del término, vertiginoso”, concluye el directivo de DEXTER.